Cada 18 de julio se celebra la tradicional romería de Santa Mariña de Augas Santas
Esta iglesia ubicada a unos 6 kilómetros de Allariz
atrae todos los veranos romeros movidos por la fe y la leyenda que rodea la fuente,
el horno y el estanque.
En el Concello de Allaríz
(Ourense), entre los valles del Arnoia y el Barbaña, se encuentra Santa Mariña
de Augas Santas, cuyo entorno fue declarado Monumento histórico artístico en
1931. Constituye un enclave en el que se mezcla historia, arte y paisaje, con
un aderezo de tradición y leyenda vinculado al martirio de la Santa.
Dice la leyenda que Mariña, hija
de un moro y huérfana de madre, fue entregada por su padre a una mujer cristina
que bautizó a la niña, razón por la que el padre no quiso saber nada de ella. A
los 15 años un prefecto romano, de nombre Olibrio, se enamoró de ella pero no fue
correspondido. Como venganza, la encerró y la torturó con la sorpresa de que a
los tres días de cada tortura ella ya estaba curada de sus heridas. La quemó y
la arrojó a un pozo de lo que también salió como por arte de magia. Finalmente
la decapitaron y al caer su cabeza al suelo rebotó tres veces naciendo tres
manantiales, que se pueden ver en el exterior de la Iglesia y cuyas aguas dicen
ser tan milagrosas que curan todo tipo de enfermedades y expulsan los malos
espíritus.
La realidad es que inicialmente
se levanta una pequeña iglesia en torno a los lugares santificados por el
martirio que posteriormente, en la época de la reconquista, se amplía. A finales
del siglo XII los canónigos de San Agustín iniciaron la construcción de la
actual iglesia, cuya conclusión corresponde a los templarios en el S XIII.
Suprimida la orden de los templarios, toman nuevamente el protagonismo los
agustinos a partir del siglo XVI. Su construcción guarda semejanzas con la
iglesia próxima de Xunqueira de Ambía.
Foto: Santa Mariña de Augas Santas. / Xibeliuss
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