Cruceros

¿Es peligroso un crucero? Hay quien cree correr más peligro en tierra firme

Unas vacaciones en crucero deberían ser divertidas y relajadas pero a veces se convierten en desastres porque un barco crucero es como una pequeña ciudad donde no se debe bajar la guardia.

Vivir en una ciudad receptora de grandes cruceros te da la posibilidad de gozar con el espectáculo de ver atracar y zarpar esas moles que constituyen verdaderas ciudades flotantes y de interactuar con los cruceristas mayoritariamente sajones. En este contexto, la ciudad Vigo ha recibido recientemente, por dos veces, al crucero más grande del mundo, el “Oasis of the Seas”, y está preparada para acoger la llegada en viaje inaugural en el mes de abril de los cruceros “Britannia” y “Anthem of the Seas”.

Esto me trae a la memoria que una de las primeras veces que subí a un barco, situación que me sigue dando reparo incluso si se trata de las lanchas del Parque del Retiro madrileño, fue en una excursión por el Delta del Tigre, desde la orilla argentina del río de la Plata. Fue una agradable excursión para mis acompañantes que no se si disfrutaron más del entorno o de verme a mí agarrado al palo central de aquella barcaza, que era mío y solo mío. Lo cual me lleva a pensar, ¿son seguros los cruceros?.

No es tan infrecuente que buques de pasajeros, sin necesidad de tomar como ejemplo los ferrys que operan en el sudeste asiático, encallen (Costa Concordia) o se incendien (Oceania Insignia), que se produzcan intoxicaciones masivas (Vision of the Seas), que sean asaltados (Celebrity Eclipse), que se queden a la deriva (Carnival Triumph), sin contar otros peligros como el de no poder tomar el crucero por quiebra de la agencia de viajes, el cargo de gastos adicionales una vez atrapado a bordo o el de quedarte en tierra en una escala por un retraso. Así y todo, estadísticamente no resulta un medio peligroso por tanto, a quién le guste y se lo pueda permitir, que disfrute de un buen crucero.

Foto: Puerto de Vigo / Fco Toba Vilela

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